VISITA AL VIVERO DE JOSEP PAMIES

un sueño hecho realidad

Supe de Josep Pamies, y de su movimiento Dulce Revolución hace unos 8 años, coincidiendo con el cambio que implacablemente se manifestaba en mi vida.

A partir de conocer su trabajo, participé de varios talleres de reconocimiento de plantas comestibles y medicinales, acopié libros y pdf, probé, mastiqué y escupí unas cuantas plantitas.

Desde que vivo en Tabay, Corrientes, muchas especies se incluyeron en mi “vademécum” personal, ayudada por mi gran vecina y asistente Teresa que nació en este lugar y a quien su mamá, que no conocía otras medicinas, trataba todas sus afecciones con yuyitos, frutos, semillas  y cataplasmas.

Teresa , es una maestra excepcional, sin saberlo.   Ella misma va recuperando su antigua memoria, mientras caminamos por la chacra y yo le pregunto… “a ésta la conoces? y para qué la usaba tu mamá?”

En mi viaje a Barcelona de este año, tomé la decisión de ir a Balaguer a conocer al Maestro Pamies.

“Justamente” se reanudaban las visitas  guiadas al vivero: un lugar impresionante, lleno de magia, cuidado, amor, apertura.

Explican minuciosamente los usos, posibilidades, contraindicaciones de cada planta. Responden todas las preguntas, agradecen cada intervención, cada aporte.

Escribo este post, para contarles que eso que se respira en sus videos y charlas es así, con una pureza y dedicación absolutas.

La visita y la charla son gratuitas, podes preguntarle lo que quieras y te responde con una sonrisa, con miles de datos, con el corazón abierto.

Pasó mucha  información, que puede encontrarse también en su pagina web.

Algunas cosas que me sorprendieron:

  • la  insistencia en el necesario complemento del magnesio, como prevención de problemas cardiacos, por su influencia en los tejidos musculares.  Ojo, no magnesio en pastillas.  Directamente  las sales.  Se compra como cloruro de magnesio en las farmacias, es baratísimo y dura un montón.  Y eso mismo, sugería diluirlo en un poquito de agua y aplicarlo directamente en zonas de dolor, para problemas artríticos, de artrosis y/o contracturas fuertes (se lo suele llamar “aceite de magnesio”, aunque no lo es).
  •  las bondades de la papaya para el aparato digestivo.  Tenemos mucho mamón en Corrientes. Es la misma fruta. Sugiere tomar una mezcla de aloe vera y papaya como prevención de reflujos e irritaciones gástricas.
  • Un gran combo para  subir las defensas y depurarse en un 100×100: la infusión de Milenrama, caléndula y ortiga.
  • la importancia de comer y beber lentamente.  Insistió: más vale poco y bien salivado, que mucho bebido de un trago.
  • el romero para bajar la presión.
  • Depuración total de la sangre: una novena de infusión de ortiga (o de perejil).

“El” detalle en el tratamiento con hierbas… sugieren tomar las infusiones por novenas (¡como los rezos!): hacer 9 días de tomas, 5 de descanso, y retomar.

Mi principal pregunta  fue cómo hacer el reconocimiento de las plantas que crecen en mi casa, cómo cuidarme de una posible intoxicación.  Con una sonrisa de padre protector, me dijo ¨NO TENGAS MIEDO.  Habrá unas 4 plantas verdaderamente tóxicas, y siempre va a depender de la dosis. Hasta las más peligrosas, en su dosis mínima, pueden ser medicina.  El miedo mata más que cualquier otra cosa:  Con cautela, de a poquito, andá probando y experimentando sus efectos”.  Lo sentí como una bendición.

Concluyo el post con este antiguo cuento, que expresa bellamente el espíritu de su investigación constante:

-Un sabio sentado en la cumbre de una montaña, ve pasar una sombra y pregunta: ¿Quién eres?. La sombra le contesta -Soy la peste-. ¿Adonde te diriges? -A matar mil personas de ese poblado-. Bueno, ve y mata. A los pocos días, el sabio se encuentra con un hombre y le pregunta ¿De donde vienes? – Huyo de aquel poblado que ha sido atacado por la peste y ha matado treinta mil personas- Bueno, ve y huye. A las pocas horas, vuelve a pasar la sombra y el sabio lo detiene. Oye tú, me has engañado, dijiste que matarías mil personas y has matado treinta mil. ¿Porqué?. La peste le responde- No es cierto, yo solo maté mil personas, el resto, murió de miedo.-

Agradezco profundamente esta oportunidad y me comprometo a investigar y compartir este conocimiento que es de todos.  Que la humanidad recupere su Saber.

Salú!